Podemos engañarnos, buscar mil señales de que la innovación es sólo una moda y que, como las demás, pasará. Sí, podemos, pero sólo serviría para limitar el crecimiento y el futuro de nuestra organización. Porque la búsqueda de innovación es una tendencia, pero también es una decisión clave para la estrategia de cualquier negocio. ¿Cómo afrontar algo tan esencial? Pues con herramientas como el coaching.
Adaptarnos al cambio y a permanecer en movimiento
Cuando algo funciona, tendemos a percibir cualquier pequeño cambio como una amenaza, por mucho que racionalmente entendamos que los cambios son necesarios y que todo es mejorable. Aún así nos cuesta, los hábitos hacen de las suyas y, además, es muy posible que hayamos automatizado algunos procesos, hasta el punto de pasarnos desapercibidos buena parte de sus pasos. En este contexto es difícil que surja un cuestionamiento.
Pero, si se advierte que algo falla, puede creerse que la innovación es un potencial riesgo de acelerar el proceso “de caída”, más que lo que realmente es: la mejor opción para garantizar la continuidad de la empresa. También es común que se considere que apostar por la innovación es solo cosa de ciertas empresas con determinados recursos. Pero es algo adaptable a cualquier tamaño y sector. Porque cualquier compañía debe ser capaz de integrar nuevas ideas, procedimientos, productos o servicios con el objetivo de mejorar los procesos y el negocio.
Para romper con todas estas creencias y perder el miedo al cambio es útil el coaching en innovación.
Innovar es una necesidad con muchos beneficios
Vamos más allá: la innovación no es algo útil, es algo necesario. Aceptarlo es dar ya un paso hacia ella. Pero cada organización deberá diseñar su propia ruta hacia la innovación y convertirla en un hábito constante que implique al equipo a todos los niveles. Todo sin perder de vista que el conocimiento es su base, y que los beneficios son múltiples:
- Aumento de la productividad.
- Optimización de procesos internos.
- Retención de clientes.
- Adaptación a los cambios del mercado.
- Aumento de la notoriedad de marca.
- Mejor atracción y retención de talento.
- Identificación de nuevas oportunidades.
El coaching, una herramienta para avanzar
El coaching es un proceso, un entrenamiento a medida durante el que la organización recibe asesoramiento y acompañamiento. En muchas ocasiones es el impulso y el apoyo que hacen falta para poder lanzarse a lo nuevo con garantías.
No perdamos de vista que la innovación es algo medible, por lo que se pueden establecer parámetros que ayuden a identificar en qué momento se encuentra la empresa. Con un proceso de coaching orientado a la innovación sabremos de qué punto partimos, marcaremos los objetivos y pondremos en marcha un plan de acción. Por otra parte, las habilidades tanto a nivel individual como de equipo serán trabajadas mediante distintas prácticas y dinámicas.
En resumen, contando con habilidades potenciadas así como con nuevas herramientas y claves, el equipo verá más factible la posibilidad de cambio. No será algo lejano o imposible, si no un reto alcanzable.
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1 comentario en «El papel del coaching en la cultura de innovación»