Lleva a cabo una actividad empresarial siempre supone un riesgo, entendiendo este como: la posibilidad de fracasar o la incertidumbre producida en el rendimiento de la inversión debido a los cambios que se dan en la situación económica del sector en el que se opera.
Cuando una persona decide arriesgar valores tan importantes como su tiempo, trabajo, dinero, ilusiones o conocimientos, no sabe si tendrá éxito o fracaso. Por ello, una de las características más destacadas de las personas emprendedoras es precisamente la valentía y la capacidad de asumir las consecuencias de su actividad.
Toda persona que se lanza con un proyecto, confía en él, y apuesta que en un plazo determinado le permitirá generar ingresos. Pero hay muchos factores que pueden ocurrir tanto dentro como fuera de la empresa que exigen la toma de decisiones. Algunos de estos factores pueden ser: cambios en la distribución de productos, aparición de nuevos competidores, crisis económica, etc.
El éxito no se logra solo con cualidades especiales,. Es sobre todo un trabajo de constancia, de método y organización. J. P. Sergent
Por tanto, podemos decir que el riesgo es un factor que está siempre asociado al hecho de emprender. Saber como afrontarlo o como administrarlo puede suponer el éxito o la supervivencia de una empresa, o su fracaso.
En RESULTA2 acompañamos a empresarios consolidados y a emprendedores a mejorar sus habilidades de liderazgo empresarial, aportando un doble valor como coaches y mentores para lograr minimizar los riesgos y generar proyectos exitosos.
[Tweet «Hazlo o no lo hagas, pero no lo intentes. Maestro Yoda.»]
En el próximo artículos hablaremos de como se percibe el riesgo en los empresarios: como oportunidad, amenaza o incertidumbre. ¡No te lo pierdas!
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